viernes, 5 de abril de 2013

Sudbury Valley School, Massachusetts

    Mi primera semana en Sudbury Valley School llega a su fin, parece que acabo de llegar, todo es aún nuevo, pero a la vez me siento como si conociera a esta gente desde hace meses. Es tan cómodo moverse por la enorme y preciosa casa en la que encuentras todo tipo de salas y a todo tipo de personas haciendo distintas cosas, que me siento ya un poquito parte de aquí. 
   Cuando una familia ofrece a su hijo o hija ir a Sudbury Valley School, el cole le ofrece pasar una semana de prueba. Después, decide si quiere hacer el cambio o no. En mi primer día de visita yo tenía una duda sobre cómo usar algo en la cocina y justo pregunté a un niño que me dijo que no lo sabía porque era su primer día en su semana de prueba. Los dos éramos nuevos, los dos desconocíamos el funcionamiento del cole y ambos estábamos espectantes y algo nerviosos. Nos presentamos y nos hicimos muchas preguntas. Mi motivación para estar aquí era clara, observar a los chicos y chicas y aprender cómo se organizan; la duración, también: dos semanas. Para él era diferente, su motivación también estaba clara: ser feliz y disfrutar de su tiempo sin tener que estar sentado cinco horas escuchando a profes hablar y sin tener que hacer deberes toda la tarde "Odio el colegio", me decía. Su duración: una semana que podía ser definitiva en su vida escolar. No habían pasado dos horas y ya sabía que quería pasar el resto de su escolaridad aquí, aún viendo que llegar nuevo a un lugar así puede ser difícil y requiere de un proceso de adaptación.
     Hemos hablado bastante durante esta semana, me interesa mucho saber cómo se ha ido sintiendo y él parece estar muy interesado en cómo estoy yo porque me devuelve las preguntas que le hago y cuando ha probado a hacer algo nuevo, como usar el torno para trabajar arcilla, me ha dicho "you should definitely try this!", como si fuera una compañera más (aquí, los adultos están muy cerca de l@s niñ@s y de los adolescentes). Además de ser un chico sensible y majísimo de 11 años, creo que le gustaba sentir que no era el único que se enfrentaba a algo nuevo.

     Ya he descrito en otros post cómo funciona esta escuela pero voy a insistir en detalles que son los característicos de este sistema tan interesante. Aquí acuden diariamente unos 130 alumn@s entre 4 y 19 años, tienen que estar cinco horas entre las 9 y las 17 hr. que es cuando está abierto el colegio, y hacen básicamente lo que quieren con su tiempo. Los adultos están para garantizar su comodidad y seguridad así como para dar respuesta a las necesidades que tengan a nivel de estudios o de organizar actividades. Pero, claro, un lugar así requiere de cierto orden o de ciertas normas, ¿no? 
    Al principio, hace años, había unas pocas normas básicas de convivencia para garantizar el cuidado del prójimo, de la naturaleza y de los materiales, pero poco a poco necesitaron detallar más cada norma llegando a redactar un listado al que llaman "law book" y el cual consultan a diario mientras resuelven los conflictos en el JC, el Judicial Comitee que se reúne a las 11 a diario para atender las quejas que estén escritas. Cuando alguien pide a otro alguien que deje de hacer algo porque le molesta y no le hace caso, cuando alguien ve que alguien está haciendo un mal uso de algo o cuando alguien siente que hay algo importante para resolver, lo escribe en una hoja destinada para ello y lo deja en una carpeta sabiendo que al día siguiente a las 11, su tema será tratado. El JC está formado por 7 alumn@s de diferentes edades y una persona del staff (adultos acompañantes), todos juntos revisan las quejas y llaman a las personas implicadas, hacen las investigaciones pertinentes y deciden las consecuencias, dependiendo de las normas que hayan infringido. 
     He asistido cada día al JC. Es impresionante ver cómo funciona y cómo llegan a acuerdos y toman decisiones con un gran respeto hacia lo que los demás tienen que decir, es impresionante el cuidado con el que redactan cada informe buscando ser totalmente fieles a lo que ha ocurrido y es impresionante el tiempo que dedican a ello a pesar de que podían estar haciendo otras cosas posiblemente más interesantes para ell@s, pero saben que este sistema es el que les ayuda a mantener el orden y una convivencia agradable. Os podéis imaginar todo lo que aprenden y las habilidades que desarrollan realizando este trabajo. 
    Los jueves a las 13.00 hr. se reúne el School Meeting. Es la reunión o asamblea a la que puede acudir toda la gente que quiera y es donde se toman las decisiones importantes y donde se revisan los informes del JC, de tal manera que todo el mundo está constantemente informado de lo que ocurre en el cole (si quiere, claro). Es una reunión seria, dirigida por un moderador o moderadora (alumn@) que sigue el "orden del día", da turnos de palabra y hace las propuestas para que sean votadas, después de haberlas discutido. 

    El resto del tiempo lo paso viendo a los chicos y chicas hablando, jugando al ordenador, con los columpios en el jardín, jugando al frisbie, al baloncesto, usando monociclos, escalando árboles,  tocando algún instrumento de música o grabando en el estudio, pintando, cocinando cookies para el día de puertas abiertas, o leyendo tranquilamente en uno de los múltiples sofás que hay en la escuela. 

   Tod@s son diferentes, personas interesantes, capaces, educadas, respetuosas, amables, generosas, confiadas, divertidas, sinceras, etc... y eso es lo que se respira. La profe de arcilla que viene 3 días a la semana para enseñar y ayudar al que quiera, lleva años trabajando con niñ@s y dice que estos son l@s más felices que ha visto. 

     ¿Qué os voy a decir? Estoy en un punto en que lo que de verdad me importa es eso, que sean felices y que cada cual elija el camino hacia su felicidad, no que otras personas lo hagamos porque, en el fondo, en el cole no pensamos normalmente en su felicidad, pensamos en que hagan lo que queremos que hagan y que, a ser posible, no les incomode demasiado pero no les preguntamos jamás sobre lo que necesitan para ser más felices, y cuando lo expresan, nos reímos de ell@s.  
      Me ha emocionado de verdad hablar con mi nuevo amigo de 11 años, no sé si es porque sufre en su cole, tal vez porque me ha contagiado su emoción por venir a este colegio o porque he conectado con mi niña interna, a la que le habría asustado llegar a un sitio nuevo como éste pero a la que le habría encantado encontrar este lugar que te ayuda a ser tú misma sin esperar a tener 30 años y pasar por mil experiencias para conseguirlo.
    Ya han venido a recogerle. He salido a despedirme de él. Nos hemos deseado mucha suerte. Su cara está llena de esperanza, sabe lo que quiere y sobretodo sabe lo que no quiere. Le he observado desde una ventana mientras recorría el camino hacia el parking y he sentido como mi corazón ha latido de otra manera. ¡Suerte, amigo!









1 comentario:

Bernardo Mateu dijo...

Yo también odio la escuela tradicional como dice ese colega tuyo de ahí, da cosa decirlo, parece que se la demoniza a ella y a todos los niñ@s, padres y profesores que ahí están, pero no es así. De lo que se trata es de poder abrirse a conocer estos sitios dónde tú vas y otros similares en nuestra zona, la de cada uno, afortunadamente cada vez hay más. Es como tratar de dejarse invadir por algo nuevo sin tratar de incluirlo en nuestras experiencias previas, tratar de sentirlo y sentir lo que sienten los demás, a ver que efectos produce en nosotros. Pueden surgir mil dudas, críticas y fantasías, cada uno tiene las suyas en este recorrido. Este material es valiosísimo, pero hay que trabajarlo...Dentro del grupo de gente que se acerca a estas opciones educativas existen muchas dificultades para acabar de aceptarlas y creérselas, es como si a mucha gente le interesase pero luego no pueden dar el paso en ninguna dirección. Por otro lado hay muchas ganas...vendría a jugarse lo que comenté en el post anterior del deseo versus neurosis de destino, de cada uno, todo ello desconocido pero que no deja de pujar y tener efectos. Las frases escuchadas durante la infancia por los niñ@s durante toda una vida con sus padres, portadores y eslabones de una cadena familiar de la que nada saben de lo que transmiten sin saberlo, pero que no paran. Los profesores 8 horas con sus discursos tratando de controlar 27 niñ@s en un aula,dirigiéndoles... Las frases oídas actúan como órdenes hipnóticas que ejecutamos en la vida posterior y adulta.
No tengo ninguna duda de que el cambio pasa por la elección de cada uno de una terapia personal, la que cada uno considere más certera, más subversiva, más movilizadora...
Como en este cole en que estás de lo que se trata es de no obligar, los niños obedecen por miedo y por no perder el amor de los padres y educadores, los niños son muy dependientes. Se trata de hablar para dar otras opciones, de dejar opinar y criticar, de dejar hacer,de ofertar... al menos en este colegio donde estás los nin@s no padecen los discursos, ni los castigos ni las amenazas, ni las exigencias que se hacen a diario sin dase cuenta... tarea imposible, pues la repetición es inconsciente , solo se para esto si uno quiere ser escuchado, si cada uno quisiera saber en lo que participa sin saberlo.
Me he sentido identificado primer día que conocí Alavida.org o los días que mi hijo empezó en el Saltamontes (http://grupojuegonaturalezasaltamontes.blogspot.com.es/)...emoción, lágrimas... ellos mismos saben y pueden decidir que quieren, me parece fantástica la posibilidad de que prueben los niños si les gusta el sitio, que comparen, pero este derecho no se les da a ellos habitualmente...como nosotros no podemos tampoco les dejamos a ellos... y gira la noria, Jajajaja, vaya chapa he echado !!!
Abrazos a tod@s los lectores del blog y a ti también.