martes, 15 de diciembre de 2015

"Todas las personas deberíamos ser feministas"


En Suecia, todos los adolescentes de 16 años van a recibir una copia del libro "We should all be feminists" de Chimamanda Ngozi Adichie.


     
        Una de las cosas que me gusta de la lengua inglesa es que es muy poco limitante en cuestiones de género. Se pueden decir muchas cosas en las que se sientan incluidas todas las personas: niños y niñas a la vez, hombres y mujeres, etc. Sus pronombres (en plural: we, you, they) no son femeninos ni masculinos, son unisex. Lo mismo ocurre con los artículos (the, this, that, those...), y los adjetivos no cambian de sufijo en función de a qué o quién califiquen (good, beautifull, funny, ugly...). Tienen palabras en plural que pueden incluir a ambos sexos: usan "children" para referirse a niños y niñas, "siblings" para hermanas y hermanos, "all" para todas y todos, etc.
      No pretendo escribir hoy sobre las diferencias entre las lenguas pero me sorprendió el título de este maravilloso libro escrito por Chimamanda Ngozi Adichi: "Todos deberíamos ser feministas". Me sorprendió que pusiera "todos" (a lo mejor ella lo supervisó y le pareció correcto pero a mí me sorprendió) y, desde luego, no es el título que ella le puso en inglés ya que en inglés es "We should all be feminists" cuya traducción exacta no se puede hacer ya que no existe una sola palabra para traducir "all", usamos esa: todos, pero a día de hoy muchas personas consideramos que esa palabra no incluye a todas las personas. Por lo tanto la traducción más adecuada sería o bien la que he puesto en el título, o "todos y todas deberíamos ser feministas".
      
      Supe de la existencia de esta mujer hace ya varios años cuando mi amiga Vicky me envió la charla TED (creo que fue la primera TED que vi) titulada "The danger of a single story" ("El peligro de la historia única"). Me encantó lo que decía y cómo lo decía.



      Ahora me llega algo nuevo de ella, de las manos de mi amiga María y su pequeño y exquisito regalo de cumpleaños (pequeño por el tamaño del librito). Es la publicación de otra charla TED en un libro de pequeño formato de 55 hojas, donde hace una exposición sobre la situación (antigua y actual) del hombre y la mujer en la sociedad, e invita a que todas las personas seamos feministas, entendiendo por eso lo siguiente:

 "hay un problema en la situación de género hoy en día y tenemos que solucionarlo, tenemos que mejorar las cosas y tener una igualdad social, política y económica entre los sexos"

      Creo que lo mejor es que veáis la charla y que os compréis el librito para subrayar todo lo importante que no debemos olvidar. Yo solo voy a añadir alguna cosa más a partir de mi propia reflexión.

      En Suecia, todos los adolescentes de 16 años van a recibir una copia del libro. Es una iniciativa de una editorial sueca para hacer que los jóvenes se cuestionen la situación del género en función de sus propias experiencias.  

      Es importante y necesario en primer lugar, que a todas las personas les quede claro el concepto de "feminismo" y, en segundo lugar, que estén de acuerdo con el mensaje de la nigeriana y se unan a este movimiento ¿Cómo? Siendo activistas de alguna manera, y eso no supone salir a manifestarse ni ponerse en contra de nadie. 
      Ser activista en este sentido supone REACCIONAR ante los pequeños y grandes gestos que a diario invisibilizan, silencian, humillan, y colocan en un lugar inferior a la mujer. Y esto no pasa solo en Africa, esto sigue ocurriendo a nuestro alrededor. 
     Ocurre cuando le ponen el ron a tu acompañante masculino y a ti el acuarius, ocurre cuando explican al hombre con el que vas a por tu coche cómo cuidar el motor del coche o cómo abrir la cuenta bancaria. Ocurre cuando nuestra actitud hacia los niños en el aula es diferente que la que nos hace dirigirnos a las niñas con suavidad o con juicio por hacer algo que "no es de niñas" (cuento más en la entrada "El rosa no es de niñas") y cuando llamamos a la mamá en lugar de al papá para que vengan a una tutoría, cuando aún no sabemos cuál de los dos es el que está disponible para estos asuntos.


       Sí, ya sé que cada vez se da menos esto que os planteo pero, precisamente por eso es más importante reaccionar ante esos "micromachismos" ya que si no, quedarán encapsulados y normalizados. Hay que reaccionar y decir algo a la persona que lo dice o hace. Eso le llevará a cuestionarse (si quiere) su actitud y tú habrás puesto un límite que está ayudando a toda la humanidad (aunque no lo creas).



"El problema del género es que prescribe cómo deberíamos ser en lugar de reconocernos cómo somos"




       El lugar que ocupa la mujer no es el único problema del que habla esta activista africana. Añadido a esta situación están los prejuicios, juicios y castigos que recibimos a diario por no ser del todo "como deberíamos ser" al haber nacido hombre o haber nacido mujer.

      Los niños y niñas, así como los adolescentes y muchos adultos, no pueden crecer y vivir en libertad porque cuando lo hacen son castigados por su familia, por sus compañeros/as y profesoras/es de clase, y por toda una sociedad que les recuerda, de muy malas maneras, cómo deberían comportarse por tener pene o por tener vulva: cómo hablar, cómo caminar, correr y sentarse; qué emociones mostrar; con quién acostarse y cómo hacerlo; qué actividades lúdicas y deportivas; qué juguetes tener y hasta qué turismo hacer...más otras tantas que os invito a compartir. 

       El género no debería limitar la autenticidad de cada persona aunque hasta ahora lo haya hecho. Debemos respetar lo que los niños y niñas quieren ser y hacer, escuchemos sus deseos y respetémoslos siempre que no lastimen a nadie ni a sí mismos/as, porque cuando no lo hacemos, SUFREN y se llenan de contradicciones e inseguridades que no ayudan nada y les auguran un futuro más difícil, os lo aseguro.

       Os invito a que dediquéis un ratito a ver el vídeo y después le deis difusión. Tenemos mucho por hacer aún y lo haremos. 
¡Seamos todas y todos feministas!